Después de
embarcar en Rotterdam tras un viaje sin incidencias en coche, avión y tren,
vuelvo a navegar. Esta vez más al norte de lo que jamás he estado.
Como no hay
mucho que contar de experiencias personales, cuento historia para desoxidar los
dedos. Y el cerebro.
Casi al final
del puerto de Rotterdam, saliendo en barco, se pueden observar a cada lado de
la bocana unas estructuras gigantescas que parecen puentes que no llegan a
ninguna parte. Vistas desde el aire recuerdan a los palos de un pinball.
Esa
monstruosidad, que mide como la Torre Eiffel tumbada pero pesa cuatro veces
más, es la barrera de Maesland y sirve para cerrar completamente el puerto de
Rotterdam. Cerrarlo de verdad, no como cuando los picoletos se ponen en
Guadarrama y dice “aquí no pasa nadie”.
Me refiero a cerrarlo en plan que no pase ni una gota de agua. Esta
barrera, fue el resultado final del Plan Delta.
En 1953, año
en el que nació Alex Van Halen allí al lado, hubo en Holanda una inundación
catastrófica en la que murieron más de 1800 personas y un montón de vacas y
ovejas. Un temporal como pocas veces se había visto por allí junto con mareas
vivas resultó en la destrucción de varios diques y la entrada de agua a
raudales en varias poblaciones. Como aquello no se llama Países Bajos porque
sí, fue un auténtico desastre. A aquello lo llamaron “De Watersnood”, La
Inundación. Con mayúsculas.
Después de
paliar los daños, los holandeses se reunieron para tomar medidas para que
aquello no se volviese a repetir. Aquello se llamó la Comisión Delta, que
parece sacado de Los Vengadores, pero que en realidad tiene más que ver con los
deltas de los ríos. Al final de la última reunión se dijo algo tal que así: “Van
coleguen, igual deberíamos aplicarnos el refrán de que no se le pueden poner
diques al mar, pero somos holandeses y lo único que sabemos hacer aparte de
zuecos, queso y molinos, son diques. Así que, al tajo.” Desarrollaron el Plan
Delta y con la cabezonería y la eficiencia de los pueblos del norte de Europa
construyeron más diques, más altos, más gordos y mejores que los anteriores.
Esto les
llevó 40 años, que en tiempo de obras españolas equivale a unos 13 siglos y
medio. La obra culmen, fue la barrera móvil del puerto de Rotterdam, que parece
la puerta de la muralla de Pacific Rim.
Y esa es la
historia.
Que bueno que volviste , para entretenernos .ok
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