He estado en
astilleros de España, Italia y Chipre. Y he conocido opiniones de primera mano
de gente que ha estado en Grecia y Turquía. En todos ellos, la primera palabra
que aprendes y la que es más frecuentemente usada es “mañana”. Domani. Abrio.
Estos días
estoy conociendo un astillero holandés. Esto es otra cosa. A pesar de mis dudas
iniciales, ahora mismo estoy completamente seguro de que el barco estará
terminado en las fechas previstas dentro de seis meses. Más que nada porque los
he visto trabajar.
Empiezan a
las ocho de la mañana. Y me refiero a que a las 8 está ya cada uno en su puesto
y con la herramienta en la mano. No tomando un frappé o comentando con el
colega el partido de la noche anterior. Luego tienen un descanso de 15 minutos
de 9 y media a 10 menos cuarto. Descanso que no se toman si están ocupados
pintando o haciendo algo que no pueda esperar.
A las 12 y
media paran media hora para comer. Y aquí sí que tengo mi única pega. No sé
cómo este puede ser un país con una estatura media tan alta comiendo como
comen. El mítico menú del comedor de Manzaneda más conocido como “Sopa de,
patatas con” es alta cocina comparado a esto.
Vale que por
menos de 5 euros que cuesta no puedes esperar exquisiteces, pero sí que se
puede esperar algo de variedad. Siempre es lo mismo. Dos tipos de sopa (lo
mejor del menú y dónde más variación hay). Dos tipos de miniensaladas de entre
tres distintas. Un tipo de sándwich (tosti le llaman aquí. Una buena tostia sí
que se merecía el responsable del comedor) que cambia cada semana. Y una
variedad de tres o cuatro cosas rebozadas y fritas. Y digo cosas porque no sé
muy bien que son. Todas parecen algo a medio camino entre salchicha y
hamburguesa, pero un día cogí una que resultó ser una mezcla de arroz rebozado
pasado por la freidora. Ni rastro de pescado. Ni siquiera de pasta.
Pero en fin,
sigo. A la una siguen trabajando hasta las cuatro de la tarde que salen. La
cantidad de gente que está involucrada en cada proyecto es increíble. Y la
organización que demuestran día a día es algo que no había visto en mi vida.
Hasta para ir al baño tienen un proceso establecido que todos siguen a
rajatabla. A veces puede parecer que todo va un poco lento debido a tal
devoción por las normas, pero en los plazos pactados ya cuentan con esto.
Así que
supongo que a mediados de Julio habrá un nuevo armador muy contento.
La
tripulación ya veremos.
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